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Conocer Madrid es una aventura que puede llevarte varios días. Con tantas cosas por ver, es difícil creer que en un solo viaje puedas apreciar el majestuoso encanto de la capital en toda su expresión. Aunque también es cierto que con tantos atractivos que hay a su alrededor, sería una oportunidad desperdiciada no conocer alguno al visitar la ciudad. Uno de ellos es Aranjuez, una pintoresca villa situada a menos de una hora en tren, llena de sitios históricos y maravillas arquitectónicas.

Como muchos otros lugares en España, Aranjuez tiene una rica historia que podría alimentar varios relatos, pero de todos estos acontecimientos hay uno que destaca: el nombramiento de Real Sitio de la Corona de España que recibió de parte del rey Felipe II en 1560. Un año después, se ordena la construcción del Palacio Real de Aranjuez, que hasta la fecha continua siendo una de las residencias de la Familia Real Española.

Aranjuez es y ha sido un lugar muy especial. Durante mucho tiempo, la villa solo fue habitada por el rey y la nobleza. Su planeación y arquitectura son reflejo de la distinción que ha recibido. A diferencia de otras ciudades en España, Aranjuez tiene un aire solemne, imponente. Por esta razón es que en el año 2001, el Paisaje Cultural de Aranjuez fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

Por su cercanía, Aranjuez es el destino perfecto para un viaje de 1 día fuera de Madrid. Puedes comenzar tu recorrido por el Palacio Real, que está muy cerca de la estación de tren. El Palacio y sus inmensos jardines son la atracción principal de Aranjuez. Más tarde, puedes explorar el centro de la ciudad, caminando por el bulevar Capitán Angosto Gómez. Y para terminar, no hay nada como dar un paseo en bote por el río Tajo.