El romanticismo etéreo de Delpozo

La moda española ha tenido grandes representantes a lo largo de su historia. Desde los tiempos de Cristóbal Balenciaga, quien ha sido catalogado como uno de los couturiers más importantes a nivel internacional, hasta la actualidad; varios han sido los nombres que se han encargado de dar a conocer el estilo español al resto del mundo. Delpozo es uno de ellos.

Fundada en Madrid en 1974 por Jesús del Pozo, la marca originalmente era una propuesta de moda masculina. Algunos años más tarde, en 1978, el diseñador presentó su primera colección para mujer. A partir de ese momento, del Pozo fue construyendo una larga y constante carrera en ascenso, cimentando su popularidad entre un público deseoso de moda más propositiva. Su predilección por el diseño conceptual y su capacidad de concebir la moda como una industria fueron las razones su éxito.

Todo esto fue motivo para que Jesús del Pozo fuera merecedor de una infinidad de reconocimientos, de los cuales el más importante fue la Medalla de Oro al Mérito de las Bellas Artes (1998), que lo convirtió en el primer diseñador de moda en haber recibido este galardón. Lamentablemente su brillante trayectoria llegaría a su fin en 2011, cuando la noticia de su fallecimiento tomó por sorpresa al mundo de la moda.

Este acontecimiento no significó el fin de la propuesta de Jesús del Pozo. Un año después, la marca renació bajo la dirección creativa de otro español, Josep Font y con un nuevo nombre, más simple y con un aire legendario: Delpozo. Esta nueva etapa ha significado la expansión global de la firma a un nivel nunca antes visto. En poco tiempo, Delpozo se ha convertido en el favorito de diversas personalidades, como Michelle Obama o Cate Blanchett, quienes han utilizado sus prendas en eventos tan especiales como visitas de Estado o el festival de Cannes.

En la actualidad, Delpozo se distingue por sus siluetas esculturales, sus colores vibrantes y su personalidad romántica. Sus colecciones, aunque en teoría son ready-to-wear, integran elementos de la alta costura, como los bordados de la casa francesa Lesage. Desde el 2013, Delpozo presenta sus desfiles en Nueva York, en donde ha sido recibido con excelentes críticas de parte de los editores de moda.