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Cuando piensas en una noche de diversión no te imaginas bailando al interior de un edificio estilo Neoclásico de finales del siglo XIX, ¿cierto? Pero justo eso es lo que ha dado vida a un lugar emblemático de la vida nocturna madrileña: el Teatro Joy Eslava. Su nombre puede causar un poco de confusión para aquellos visitantes que llegan buscando pasar un buen rato, pero es necesario decir el Joy Eslava lo único que tiene de Teatro es el recinto en el que se ubica.

Construido en 1871 en la calle del Arenal, el Salón Eslava (Como se llamaba originalmente) fue un espacio muy popular en el que se hacían representaciones de distintos tipos de teatro. Incluso llegó a tener una etapa en la que funcionó como local de cabaret. Más de un siglo después de su inauguración, se cambió el teatro por la música y fue así como nació la discoteca Joy Eslava.

Su concepto es especial lo veas por donde lo veas. Lo que lo ha convertido en uno de los lugares de ocio favoritos en Madrid es que el Joy Eslava ofrece algo de entretenimiento para todos los gustos. Su programación musical cambia según los días. Por ejemplo, los martes están dedicados a los elegantes beats del house y los miércoles se baila al ritmo del hip-hop y el RnB. Ocasionalmente se alternan espectáculos especiales, como conciertos, desfiles de moda o estrenos cinematográficos que hacen que la propuesta del lugar sea inigualable.

El Joy Eslava ha abierto sus puertas día tras día durante más de 30 años sin perder un poco de relevancia en la escena nocturna de la capital. Su público es tan ecléctico como la música que marca el ritmo en la pista, desde Mecano hasta Stevie Wonder. Con tanto que ofrecer, una noche en el Joy Eslava siempre es garantía de diversión.